PUNTO G MASCULINO

Existen muchos tabúes respecto al placer masculino sobre si existen diferentes tipos de orgasmos para ellos, su intensidad, ¿Cómo alcanzarlos? ¿Dónde estimular?

Si tú también te has preguntado ¿Cuáles son sus zonas erógenas? ¿tienen punto G como nosotras? ¿Dónde esta? ¿Cómo se estimula? Este Blog te va a ayudar muchísimo.

De acuerdo con varios estudios el cuerpo del hombre y la mujer tienen muchos parecidos en sus zonas erógenas (estén pendientes de nuestro siguiente Blog ya que ahí les diremos y enlistaremos las zonas erógenas de ambos).

Hablando de estas zonas erógenas hoy vamos a concentrarnos en una en especial, el punto G masculino, se le llega a conocer así para hacer referencia a nuestra propia zona erógena, en lo que respecta al “PUNTO” del hombre se refiere a estimular la próstata por eso también se le conoce como “punto P” o “Punto H” de hombre.

¿QUÉ ES ESTE “PUNTO” Y DONDE SE ENCUENTRA?

La glándula prostática, es la responsable de producir la mayoría del semen y es una de las zonas erógenas más sensibles de los hombres. En este punto existen una gran cantidad de terminaciones nerviosas que hacen de esta zona muy sensible y placentera.

¿Dónde se encuentra?

Está en la zona de la próstata, a unos 5 a 7 cm del ano, cerca de los genitales masculinos. Para localizar correctamente el “punto” debes saber que tiene el tamaño y la forma de una nuez y que, al pasar los dedos por encima, debes notar como un pequeño bache.

Si lo encuentras, lo sabrás de inmediato, pues tu pareja no podrá disimular un enorme placer al sentir esta zona tan sensible de su cuerpo estimulada.

No siempre es fácil de localizarla, pero es posible si tienes en cuenta que está en el interior del recto. Se encuentra sobre la parte que separa la zona del pene y el ano, cerca de la uretra y de la próstata.

La estimulación del punto G masculino, punto H o punto P no se debe asociar únicamente con el sexo homosexual. Se trata de una práctica más dentro del juego erótico y sexual a la que puede recurrir también la pareja heterosexual, o bien en solitario, como variante de la autoestimulación.

De hecho, el masaje prostático o estimulación anal cada vez es una práctica sexual más habitual, alejada de los tabúes de otros tiempos.

¿Cómo estimularlo?

El tema de la estimulación del punto G en el hombre puede causar muchas dudas. Mientras que algunas mujeres temen que sus parejas se nieguen a explorar esta zona, otras sienten temor de causar daño por la falta de lubricación en el área.

Nota. - Adquiere un buen lubricante anal, visita nuestra tienda en Facebook. Recuerda procurar tener tus uñas cortas, ayudarte de lubricante anal y si gustas unos dedales de látex, parecen condones para dedo.

Pues bien, en primer lugar, lo ideal sería hablar con confianza ya que es necesario que ambos estén de acuerdo para hacerlo.

Como mujeres, es importante hacerles saber que la situación es completamente normal y que no afecta la masculinidad.

Por supuesto, lo mejor es respetar las decisiones sexuales del otro, pues de nada sirve forzar la situación.

Si él decide que quiere hacerlo, es bueno saber cómo lograr una buena estimulación. La estimulación del punto G, se puede realizar de forma interna o externa.

Externa: Puedes empezar y aprovechar cuando estas haciendo sexo oral (ya que estas justamente divirtiéndote cerca de esa zona), prueba con acariciar con tus dedos o lengua el perineo (la zona de piel que se encuentra entre los testículos y el ano), ya que la excitación de tu hombre este en aumento prueba con ejercer un poco de presión con dos de tus dedos en el perineo.

También pueden probar con los ejercicios de Kegel para hombres, ¿Qué son estos? Cuando inicies el sexo oral pídele a tu pareja que contraiga sus músculos pélvicos ¿Cómo? Dile que haga el movimiento que hace cuando tiene ganas de orinar (cuando se aguanta, que apriete y relaje los músculos). Con este simple movimiento se pueden alcanzar orgasmos hasta 10 veces mas intensos.

Interna: Después del masaje en el perineo viene la estimulación interna.

Mueve el dedo alrededor de su ano con suavidad. Ayúdate con un poco de lubricante para introducirlo, ¡con cuidado! Intenta meter tu dedo unos 4 a 6 cm hasta que sientas una pequeña “nuez”. Cuando llegues ahí, estarás en el lugar indicado.

Al principio puede que lo sientas un poco raro, pero no tardara en disfrutarlo. Recuerda que tendrás que escuchar muy bien lo que te pide tu pareja, Él es el mejor para guiarte, podrá decirte que no tan profundo o que solo dejes quieto tu dedo ¡escúchalo! Esto será lo mas importante.

Una vez que estés dentro intenta imitar con tus dedos el movimiento de “ven acá”. Esto masajeará la zona y ¡lo volverá loco!

Intenta pensar en lo que te gusta cuando tu pareja estimula tu punto G y haz lo mismo. Hacer los mismos movimientos que haces para estimular tu propio punto G es lo ideal. Pon el mismo cuidado y tiempo que usarías para ti misma en lo que respecta a presión y velocidad. Hazlo despacio al principio.

Probablemente la primera vez alcance el orgasmo muy rápido cuando encuentres el punto correcto. Les recomendamos que estén relajados y no se presionen mucho, no siempre se alcanza el punto G la primera vez.

Ahora que estás en el lugar adecuado, puedes probar diferentes cosas con tu pareja, como los juguetes sexuales para ellos, porque no solo son para las mujeres, adquiere uno y explora con él para saber lo que les gusta.

Antes de explorar estos juguetes, es posible que quieras probar con algún pequeño dilatador para que te acostumbres.

"Si adquieres uno que sea con la base más ancha, para que no se pierda por ahí y no termines en la sala de emergencias" para eso consulta con los expertos de Ke Kuko, ya que no todos los juguetes son diseñados para estimular esta zona.

A los más temerosos hay que sacarles de la cabeza que esta situación los llevará a cambiar su orientación sexual. No porque disfrutes de esta nueva zona significa que tu sexualidad sea otra.

Su estimulación no es una práctica homosexual exclusiva y se puede combinar con otras prácticas como el sexo oral, coito o masaje a zonas erógenas. El resultado de su estimulación es que “la excitación sea aún mayor y que se intensifiquen las contracciones pélvicas, magnificando su orgasmo hasta diez veces”.

Si quieres conocer modelos y tipos de juguetes te invitamos a visitar nuestra tienda de Facebook y el canal de YouTube para ver los diferentes juguetes que manejamos en Ke Kuko.

Lo primordial es la comunicación y que ambos están de acuerdo antes de probar esta práctica.

“Nunca es tarde para vivir plenamente tu sexualidad”

Liz Castañeda

Educadora de la Sexualidad